domingo, 11 de octubre de 2015

la IMAginaciÓn te salvA!


las cosas no desaparecen. Lo intenté varias veces, pero la desintegración simplemente no sucede.
Entonces en un intento de inercia hacia la vida se hizo la luz había que transforma generaR algo con toDO esto que había.
la impotencIa, alguna que otra tristeza y la sed del color hicieron en mí ingredientes primeros para embarcarme en esto. Era locura en ese momento , era una guacha y el cobre faltaba pero de manera irremediable me lo había propuesto a mi misma. la ideAs bailabaN, y cacheteban el ambiente y allí nació el sueño: vestir con ideas. Quería bautizarlo, como un rito sagrado, como un juego, un juego serio.

SAla de comedor, la novela VEnezolana se hacíA carne en caSA, yo era la SHeila.
otro día de enero, calor,  MAte medio lavado, sin cable y sin internet, la película del hombre araña con un mal doblaje  avanzaba a la par de las agujas. NO me interesaba mucho esa historia, no me divertían las arañas... ahi terminé enganchadísima  con el flaco de la acrobacia que escupía redes por sus muñecas. MEto emoción con cualquier cosa que me cuelgue, meto moco y puteada en voz alta.
De pronto aparece ella la Tía, Tía Mei. QuedÉ copada con esa mujer, qué importante su lugar, su amor su ternura y rápidamente quise tenerla para mí.
Tía Mei, dije tía mei. 
NO podía materializarla, no podía traerla a montevideo pero si podía inventar una Tía, otra Tía es más yo podíA ser de a RAtos ella, y Ahí como un rayo iluminado nació sin demorar Tía SHei. 
si, Tía Shei
EL culebRón y el amor condensaDOs en un nombre, en una historia, en un proyecto .
POrque por suerte del drama y del amor se pueden parir colores.
POrque por suertE y por garra la imaginación te salva.


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